Depresión: ¡no era culpa del bajo nivel de serotonina!
¿Es posible que todo lo que nos han contado sobre la depresión esté MAL?
Una nueva investigación ha arrojado luz sobre uno de los mayores ultrajes de la medicina convencional. Tiene que ver con la depresión, una condición mental grave y debilitante que afecta a más de 7 millones de personas adultas. Y puede ser TAN abrumadora que es responsable del 16% de TODOS los suicidios que se producen entre personas mayores de 65 años.
Durante décadas, la corriente principal nos ha estado diciendo que la depresión es causada por un “desequilibrio químico”, que incluye un nivel bajo de una sustancia química del cerebro, la serotonina.
Y en consecuencia las grandes compañías farmacéuticas han estado impulsando medicamentos antidepresivos para “arreglarla”, sin importar todos los efectos secundarios que tienen.
Pero una revisión innovadora encontró que la corriente principal está TOTALMENTE EQUIVOCADA sobre la CAUSA de la depresión, y que MILLONES de personas podrían estar tomando pastillas PELIGROSAS… PARA NADA.
Sorprendiendo a los científicos
La depresión roba la alegría de vivir a quienes la sufren. Les hace sentir tristes, desesperanzados y abrumados por sus actividades cotidianas.
Cada nuevo diagnóstico son buenas noticias para las grandes farmacéuticas: otra oportunidad de vender más medicamentos que destruyen el cerebro.
Los grandes sumos sacerdotes de los fármacos para la depresión son los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), que actúan al “normalizar” los niveles anormalmente bajos de serotonina.
Pero cuando un equipo de investigación se sumergió profundamente en décadas de investigación sobre la depresión y la serotonina, quedó atónito por lo que descubrió.
“Esta investigación me abrió los ojos y siento como si todo lo que pensaba que sabía se hubiera puesto patas arriba”, admitió el codirector del estudio, llevado a cabo por la University College de Londres (UCL) y publicado en Molecular Psychiatry.
La revisión exhaustiva incluyó la comparación de los niveles de serotonina entre decenas de miles de sujetos, tanto pacientes con depresión como con pacientes sanos.
Los investigadores esperaban que los niveles de serotonina de ambos grupos VARIASEN mucho. En cambio, eran los MISMOS.
¿Su conclusión? “NO hay evidencia clara de que la depresión sea causada por anomalías en la serotonina”.
Esto es TREMENDO, así que déjeme repetirlo: Es probable que la depresión NO sea causada por niveles bajos de serotonina.
Y la cosa se pone peor, porque el uso de antidepresivos a largo plazo redujo los niveles de serotonina en suero de los sujetos, exactamente lo contrario de lo que se supone que hacen esos medicamentos.
Si bien los datos no identificaron cuál es la causa de la depresión, mostraron que los acontecimientos adversos de la vida afectan fuertemente el estado de ánimo… y no se pueden reducir a una simple ecuación química.
Pero el equipo aún no había terminado. Tuvieron palabras duras para la industria farmacéutica, y cómo creó la creciente dependencia de estos medicamentos.
“Miles de personas sufren los efectos secundarios de los antidepresivos, incluidos los graves efectos de abstinencia que pueden ocurrir cuando las personas intentan suspenderlos, pero las tasas de prescripción siguen aumentando”, escribieron.
“Creemos que esta situación ha sido impulsada en parte por la falsa creencia de que la depresión se debe a un desequilibrio químico. Ya es hora de informar al público que esta creencia no se basa en la ciencia”.
Venciendo la depresión de forma natural
Estos resultados son un paso en la dirección correcta, pero se necesita más investigación.
Mientras tanto, si actualmente está tomando antidepresivos, NO deje de tomarlos por su cuenta. En su lugar, hable con su médico para ayudar a prevenir los peligrosos efectos secundarios de la abstinencia.
Luego, hable con él sobre los muchos tratamientos no farmacológicos seguros y comprobados que han funcionado de maravilla para las personas con depresión, incluidos los casos graves.
Una opción es un tipo de psicoterapia llamada terapia cognitiva conductual.
Otros han tenido éxito con complementos naturales como curcumina, 5-HTP, SAMe, CBD y vitaminas del grupo B (especialmente B12 metilada).
Hable con un médico de medicina integrativa o funcional, quien puede recomendarle las mejores opciones para usted.