La madre naturaleza puede SALVAR su cerebro (¡increíble!)
El otoño es una estación maravillosa para realizar excursiones y paseos por el campo, pues la naturaleza ofrece un increíble espectáculo de colores, con sus hojas pasando del verde al amarillo, naranja y rojo. Además, el aire es más fresco y la experiencia del contacto con la naturaleza puede ser realmente sobrecogedora.
Así que le animo a aprovecharlo. Después de todo, no hay nada mejor para el cuerpo y el alma que dar un paseo y disfrutar de la generosidad de la naturaleza.
Pero eso no es TODO lo que la Madre Naturaleza tiene para ofrecer.
Porque según un nuevo estudio, disfrutar de la naturaleza puede hacer maravillas por la salud de su CEREBRO.
Verde y saludable
El simple hecho de estar en entornos naturales como parques, bosques y ríos puede calmar el estrés y ayudar a recuperar la concentración. Pero según una nueva investigación de la Harvard T.H. Chan School of Public Health, que es la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard, puede hacer mucho más.
Resulta que vivir cerca de parques y ríos reduce la progresión de enfermedades neurológicas como el alzhéimer y el párkinson.
En el estudio participaron más de 62 millones de personas mayores de 65 años, cuya ubicación y riesgo de enfermedad neurológica fueron rastreados durante más de 15 años.
Y después de analizar los datos, los investigadores descubrieron que cuanto MÁS VERDE era el entorno de los sujetos, MENOR era su riesgo de desarrollar cualquiera de las enfermedades.
No están seguros de por qué, pero el vínculo con el alzhéimer podría estar relacionado con los efectos calmantes de la naturaleza sobre el estrés. Porque cuando se está estresado, los niveles de cortisol aumentan. Y los niveles altos de esta hormona del estrés reducen la actividad del hipocampo, que es la parte del cerebro fundamental para las funciones esenciales de la memoria.
En cuanto al párkinson, las personas con fácil acceso a la naturaleza tienden a ser más activas físicamente. Eso ayuda a preservar la función motora y la movilidad, que a menudo se pierden debido a la enfermedad.
Salga ahí fuera
Amigo mío, la conclusión de este estudio es simple y placentera. En lugar de quedarse sentado en el sofá frente al televisor durante horas y horas, salga y pase tiempo en comunión con la vegetación natural.
Y si vive cerca de un río, una reserva natural, un bosque u otros entornos naturales, mejor aún. Son un telón de fondo hermoso y saludable para dar un paseo o disfrutar de una caminata.
Simplemente salga, respire profundamente y muévase. Descubrirá que no hay mejor manera de sentirse en paz, calmado y rejuvenecido.
Y como beneficio adicional, ayudará a mantener su cerebro sano durante muchos años.