Los peligros que acechan a las personas mayores este invierno

Los bebés y las personas mayores afrontamos mayores riesgos en caso de frío extremo invernal.

Hablemos de nosotros. Asegúrese de mantener su casa cálida. Pero eso también significa tener cuidado con las fuentes de calor para evitar intoxicaciones por monóxido de carbono o incendios.

Confíe en la calefacción central, los calentadores de ambiente homologados, las mantas gruesas y las capas adicionales de ropa como formas seguras de estar caliente.

Y, si el riesgo de intoxicación existe en su casa, asegúrese de tener detectores de humo y de monóxido de carbono para detectar peligros invisibles antes de que se vuelvan trágicos.

Congelación

Cuando hace un frío intenso, debe limitar la exposición al aire libre para evitar quemaduras dolorosas causadas por el viento, especialmente en la piel expuesta, como las orejas, la nariz y las mejillas. La congelación se produce rápidamente cuando los vasos sanguíneos se estrechan.

Si nota que la piel se torna gris o amarillenta y la siente inusualmente rígida, busque inmediatamente un refugio y recaliente LENTAMENTE las partes del cuerpo afectadas, pero no demasiado rápido. Si no controla los síntomas, pueden derivar rápidamente en daños y discapacidades permanentes.

Además, a las personas con eczema, asma y otros problemas respiratorios no les va bien el aire helado. Por eso, antes de salir, asegúrese de consultar con su médico sobre tratamientos preventivos, manejo de síntomas y señales de advertencia de emergencia que exigen una acción rápida.

Caídas

Si usted es como la mayoría de mis pacientes, la idea de perder la movilidad, y con ello la independencia, es una de las cosas más aterradoras en las que puede pensar.

Y es que las caídas son la principal causa de lesiones mortales y la causa más común de hospitalizaciones no mortales relacionadas con traumatismos entre las personas mayores.

Es un hecho que a medida que envejecemos nuestros cuerpos ya no funcionan como antes. Nuestros huesos se debilitan y nuestras fuerzas comienzan a fallarnos, lo que supone la tormenta perfecta para una caída.

En invierno tiene que extremar las precauciones. Cuando las temperaturas bajan demasiado pueden aparecer láminas heladas en los sitios más insospechados. Y un resbalón es lo último que uno quiere a partir de cierta edad.

Tampoco corra riesgos si nieva. Podemos disfrutar de una buena nevada desde la comodidad de nuestro sillón favorito y con una taza humeante de chocolate caliente en la mano.

Mantenga alejados a los visitantes con virus

Defenderse de los molestos virus del resfriado y la gripe se vuelve doblemente importante cuando el clima exterior es invernal.

Las temperaturas más bajas combinadas con espacios cerrados ofrecen condiciones ideales para la propagación de los virus. Asegúrese de lavarse bien las manos con frecuencia y tome complementos que refuercen sus defensas inmunológicas.

Además, enfermedades como el asma, la EPOC y las enfermedades cardiovasculares pueden suponer un verdadero problema cuando las vías respiratorias heladas dificultan la respiración. La combinación de enfermedades da lugar a una coinfección viral invernal especialmente peligrosa.

Manténgase alerta y controle otras señales de dificultad respiratoria, como sibilancias y falta de aire.