¿Estresado? La relación entre el intestino y el estrés

¿Está jubilado? Antes de que ocurriera, probablemente pensó que la jubilación estaría llena de mañanas tranquilas y tardes de hobbies, museos y comidas con amigos.

En lugar de eso, se encuentra haciendo malabarismos con las citas con el médico, el mantenimiento de la casa y la inesperada tarea de cuidar a los nietos.

Resulta que los años dorados traen consigo su propio conjunto de factores estresantes. Pero ¿qué pasaría si la clave para manejar todo ese estrés se escondiera en un lugar inesperado? Estoy hablando del intestino.

Más que una intuición

Una nueva investigación del Centro de Microbioma Goodman-Luskin de la UCLA ha descubierto un vínculo fascinante entre nuestra salud intestinal y nuestra capacidad para manejar el estrés.

Resulta que aquellas personas resilientes que parecen tomarse con calma los desafíos de la vida tienden a tener microbiotas intestinales más saludables. Tenían menos bacterias inflamatorias en el intestino y mostraban signos de una barrera intestinal más fuerte.

No se trata solo de la digestión: se trata de cómo el intestino se comunica con el cerebro, influyendo en el estado de ánimo, las emociones e incluso la capacidad de recuperarse de la adversidad.

La influencia oculta del intestino en su estado mental

Su intestino produce neurotransmisores importantes que afectan a su estado de ánimo y a sus niveles de estrés. ¿Sabía que aproximadamente el 90% por ciento de la serotonina de su cuerpo (a menudo llamada la “hormona de la felicidad”) se produce en su intestino? Lo mismo ocurre con aproximadamente la mitad de la dopamina, que desempeña un papel crucial en la motivación y la recompensa.

Cuando el intestino está sano, está mejor preparado para producir estas sustancias químicas que mejoran el estado de ánimo. También ayuda a mantener la inflamación bajo control, lo cual es crucial, ya que la inflamación crónica se ha relacionado con varios problemas de salud mental.

Construyendo resiliencia desde adentro hacia afuera

¿Cómo puede aprovechar el poder de su intestino para volverse más resistente al estrés? Aquí tienes algunos pasos prácticos:

• Consuma alimentos ricos en fibra. Tome frutas, verduras, legumbres y cereales integrales. Estos alimentos nutren las bacterias beneficiosas del intestino.
• Incorpore probióticos y prebióticos. Incluya en su dieta alimentos como yogur, kéfir, chucrut, cebollas, ajo y espárragos, ya que ayudan a alimentar y apoyar las bacterias buenas de su intestino.
• Priorice el sueño. Intente dormir bien entre 7 y 9 horas cada noche. La falta de sueño puede afectar la salud intestinal y aumentar los niveles de estrés.
• Manténgase activo. La actividad física regular no solo es buena para el corazón y los músculos, sino que también favorece una microbiota intestinal saludable.
• Controle el estrés. Realice actividades que reduzcan el estrés, como meditación, respiración profunda o yoga suave. Recuerde que la conexión entre el intestino y el cerebro funciona en ambos sentidos.

Si bien no podemos eliminar todos los factores estresantes de nuestra vida, podemos trabajar para fortalecer nuestra capacidad de manejarlos. Al cuidar la salud intestinal, no solo está ayudando a su sistema digestivo, sino que también te estás dando un poderoso aliado en la lucha contra el estrés.