El poder de la (verdadera) dieta mediterránea
Si le preguntan que dieta sigue, si vive en España seguramente dirá que la dieta mediterránea. Sin embargo, en nuestro mundo moderno, es fácil dejarse llevar por la comodidad de los alimentos procesados, la comida rápida y la comida para llevar, y es cada vez más habitual apartarse de ese modelo dietético.
Con horarios ocupados y tentaciones infinitas, tomar decisiones saludables puede parecer una batalla diaria.
Sin embargo, la dieta mediterránea es la respuesta. Nutre el organismo y reduce significativamente el riesgo de muerte prematura.
Magia mediterránea
Un estudio reciente del Brigham and Women’s Hospital y publicado en JAMA Network Open ha arrojado luz sobre los notables beneficios de adoptar una dieta de estilo mediterráneo, especialmente para las mujeres.
El estudio siguió a más de 25.000 mujeres estadounidenses inicialmente sanas durante un máximo de 25 años y descubrió que aquellas que seguían más estrictamente la dieta mediterránea tenían un asombroso 23% menos de riesgo de mortalidad por cualquier causa. Esta reducción del riesgo se extendió tanto a la mortalidad por cáncer como a la cardiovascular, las principales causas de muerte entre las mujeres en Estados Unidos y en todo el mundo.
¿Qué hace que la dieta mediterránea sea tan especial? En esencia, esta forma de alimentación hace hincapié en los alimentos integrales de origen vegetal, como los frutos secos, las semillas, las frutas, las verduras, los cereales integrales y las legumbres. La principal fuente de grasa es el aceite de oliva virgen extra, mientras que el pescado, las aves, los productos lácteos y los huevos se consumen con moderación. La carne roja, los dulces y los alimentos procesados rara vez están en el menú.
Impactos de largo alcance en la salud
Los investigadores responsables del estudio descubrieron que los beneficios de la dieta mediterránea podrían atribuirse a cambios en varias vías biológicas. Los biomarcadores relacionados con el metabolismo, la inflamación, la resistencia a la insulina, las lipoproteínas ricas en triglicéridos y la adiposidad se encontraban entre los contribuyentes más importantes a los efectos protectores de la dieta.
Si bien el concepto de la dieta mediterránea ha ganado popularidad a nivel mundial, es esencial tener en cuenta que las adaptaciones a la dieta tradicional en diferentes países y culturas podrían alterar su impacto en la salud.
El autor principal del estudio, Shafqat Ahmad, Ph.D., enfatiza que incluso cambios modestos en los factores de riesgo establecidos para las enfermedades metabólicas pueden producir beneficios sustanciales a largo plazo cuando se sigue una dieta mediterránea.
Es fundamental alentar a las personas a adoptar la dieta mediterránea en su forma tradicional… sobre todo si se vive en países mediterráneos como España, en los que esta dieta es parte de su cultura. Al centrarnos en alimentos integrales, grasas saludables y una cantidad limitada de ingredientes procesados, podemos dar un paso importante hacia la mejora de nuestra salud general y nuestra longevidad.
Así que, la próxima vez que se encuentre tentado por un tentempié procesado y rápido, recuerde el poder de la dieta mediterránea.