Detenga la cuesta abajo tras los 60 (¡en dos pasos!)
Al cumplir 50 años, te hacen una fiesta con globos y un montón de bromas sobre la cuesta arriba que ahora empieza.
Pero los sesenta son mucho peor.
Si constantemente siente que el tiempo se le escapa de las manos, como la mecha acercándose al final de la vela… HOY tiene la oportunidad de parar el reloj.
Cómo ganar la carrera contra el tiempo y añadir años a su vida
Un equipo internacional de investigadores ha pasado dos décadas reuniendo investigaciones, probando hipótesis y analizando datos. Y han descubierto dos factores que hacen que el cuerpo empiece a fallar.
Son la resistencia a la insulina y la capacidad aeróbica.
Estos dos factores de riesgo están relacionados entre sí. Veamos. Su cuerpo tiene una vía llamada mTOR. El hipotálamo (el núcleo cerebral que regula determinadas secreciones hormonales, además de intervenir en la coordinación de la conducta) tiene una función importante en ella, al igual que la forma que tiene el páncreas de regular la insulina.
Demasiada insulina y ejercicio insuficiente provocan diabetes y obesidad que, como es sabido, son dos de los principales obstáculos para disfrutar de una larga vida sin enfermedades.
La buena noticia es lo fácil que es mantener estos dos importantes factores en perfecto estado.
En primer lugar, la capacidad aeróbica
La clave fundamental aquí es la constancia.
Hay que hacer ejercicio con regularidad, al menos cinco veces a la semana. Y si se hace todos los días, mejor todavía. Puede ser algo tan sencillo como caminar 30 minutos, siempre que logre aumentar moderadamente la frecuencia cardíaca. Si el corazón no late con fuerza, no podrá aprovechar los beneficios del ejercicio.
También puede montar en bicicleta, cuidar el jardín o nadar; cualquier actividad que aumente la frecuencia cardíaca y la mantenga elevada durante al menos 30 minutos.
En segundo lugar, la resistencia a la insulina
El ejercicio también ayuda pero, para este factor, la dieta es lo más importante.
La insulina es la forma que tiene su cuerpo de regular la cantidad de azúcar (glucosa) en la sangre, facilitando su entrada en la célula.
Pero después de haberlo inundado con azúcar mes tras mes y año tras año, el cuerpo empieza a aumentar su tolerancia. Cada vez necesita más insulina para recuperar los niveles normales de azúcar en sangre. A medida que pasa el tiempo, las unidades productoras de insulina se acaban agotando, disminuyendo drásticamente su producción. Así es como puede padecer la temida diabetes de tipo 2, volverse obeso y aumentar el riesgo de sufrir otras enfermedades potencialmente mortales, como el infarto de miocardio o el ictus.
El ejercicio le ayudará a reducir la resistencia a la insulina, pero cambiar la dieta es fundamental.
Elimine cualquier alimento que se descomponga en azúcar en la sangre, desde el azúcar refinado en sí hasta una cantidad excesiva de fruta (rica en fructosa) o cereales integrales (ricos en hidratos de carbono de absorción lenta).
El cuerpo transforma todos los carbohidratos en azúcar, pero si se concentra en tomar mucha verdura fresca y saludable, que no esté frita, ni llena de azúcares procesados o refinados, entonces consumirá gran cantidad de fibra esencial (evitando los riesgos nutricionales) que mantendrá baja su resistencia a la insulina… y evitará ir cuesta abajo a medida que vaya cumpliendo años!