Un intestino poco saludable facilita la propagación del cáncer de mama
El cáncer de mama no es el cáncer más mortífero (el cáncer de pulmón ostenta ese dudoso honor), pero es uno de los más frecuentes adversarios de las mujeres y mata a casi 7.000 mujeres cada año en España.
Se vuelve mortal cuando un tumor maligno hace metástasis (o se extiende) desde la mama a otras partes del cuerpo, como el hígado, el cerebro o los huesos.
Y ese tumor secundario suele convertirse rápidamente en LETAL.
Los científicos han estado intentando averiguar por qué el cáncer de mama hace metástasis en algunas mujeres pero NO en otras.
Pues bien, un nuevo estudio puede haber descubierto una pista. Y esta pista no está en la mama, sino en una parte DIFERENTE del cuerpo.
Una mala salud intestinal
Puede que crea que conoce a todos sus vecinos, pero resulta que tiene unos 100 billones de compañeros que viven aún más cerca… justo dentro de su vientre.
Son los trillones de bacterias, virus, levaduras y hongos que conforman su microbiota intestinal. Y desempeña un papel CLAVE en la lucha contra las enfermedades y para mantenerse sano.
Aunque la mayoría de los “bichos” que viven en su interior son “buenos”, hay “bichos” malos al acecho que pueden ARRUINAR su salud.
Y cuando se añaden cosas como la mala alimentación, los antibióticos y el envejecimiento, la balanza puede inclinarse a su favor de los “bichos malos”.
Ese crecimiento excesivo de bacterias malas se denomina disbiosis, es decir, un intestino poco saludable e inflamado.
La disbiosis está relacionada con una larga lista de afecciones y enfermedades crónicas… desde la obesidad a la diabetes, pasando por problemas de salud mental y muchas más.
Y un reciente estudio con ratones llevado a cabo en la University of Virginia School of Medicine (en Estados Unidos) descubrió que una microbiota intestinal alterada desencadena cambios en el tejido mamario que facilitan la propagación del cáncer.
Los investigadores descubrieron que la disbiosis reprograma importantes células inmunitarias del tejido mamario sano -llamadas mastocitos- en ratones que NO tienen cáncer.
En otras palabras, un intestino enfermo prepara el terreno para que las células cancerosas se propaguen. De esta forma, si se desarrolla un tumor de mama, esos cambios en los tejidos facilitan la propagación de las células cancerosas a órganos distantes.
Se necesitan más estudios para investigar los efectos de un intestino poco saludable en el tejido mamario humano, así como si estos hallazgos podrían ayudar a identificar a las pacientes con cáncer de mama que tienen un alto riesgo de metástasis.
Mientras tanto…
Ayude a su intestino
Amigo, un intestino sano es clave para un YO sano.
Una forma de apoyar la salud intestinal es tomando probióticos, es decir, bacterias saludables que estimulan el crecimiento de otros organismos beneficiosos y apoyan un sistema inmunológico fuerte.
Recomiendo un complemento probiótico con multicepas que contenga cepas de Bifidobacterium y Lactobacillus.
También puede encontrar probióticos en los alimentos fermentados, como el yogur, el chucrut, el miso y el kéfir.
De paso, asegúrese de llenar su plato con alimentos ricos en fibra todos los días. La fibra ayuda a alimentar, equilibrar y proteger la microbiota intestinal aumentando las bacterias beneficiosas.
Buenas opciones son el ajo, la cebolla, el puerro, los espárragos, los plátanos, las manzanas, la achicoria y las hojas de diente de león, por ejemplo, además de verduras sin almidón como el brécol, las coles de Bruselas, la col rizada, la col y la coliflor.