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El secreto del mar que alivia el dolor de migraña

¡Y se sufren menos ataques!

Están los dolores de cabeza… y luego están las migrañas.

Algunas personas los equiparan, pero está claro que quienes lo hacen no han experimentado jamás una migraña.

Porque junto con el dolor pulsante y punzante en uno o ambos lados de la cabeza, las migrañas pueden causar visión borrosa, sensibilidad extrema a la luz y ruidos, náuseas, vómitos y otros síntomas devastadores que pueden durar días.

Un equilibrio delicado

Si sufre de migrañas, ya conoce el procedimiento: va al médico y le da una receta.

Los medicamentos habituales incluyen triptanos y dihidroergotamina, que son peligrosos para las personas que también padecen una serie de problemas de salud comunes, como hipertensión.

Algunos médicos incluso prescriben opioides, que son adictivos y peligrosos.

Y no podrá creer lo simple que es.

Se trata del equilibrio de grasas en los alimentos. En concreto, de los ácidos omega-3 y omega-6.

Se necesitan ambos, pero la mayoría de las personas obtienen DEMASIADO omega-6, ya que se encuentra en los aceites vegetales y de semillas utilizados en muchos alimentos procesados. Y, por el contrario, MUY POCO omega-3, que se encuentra en el pescado graso.

El estudio probó tres dietas diferentes en mujeres que padecían migrañas frecuentes:

  • Una dieta “típica”, con MÁS omega-6 y MENOS omega-3
  • Una dieta con los mismos niveles de omega-6, pero MÁS omega-3
  • Una dieta con MENOS omega-6 y MÁS omega-3

En comparación con las personas que hacían dieta «típica», las mujeres del segundo grupo tenían dos migrañas menos por mes y un promedio de 1,3 horas menos de dolor por día.

Ese es un buen comienzo.

Pero el tercer grupo fue el ganador. Tenían CUATRO migrañas MENOS por mes y 1,7 horas menos de dolor diario.

Un mejor enfoque

El estudio no probó los suplementos de omega-3, por lo que es demasiado pronto para decir si tomar cápsulas de aceite de pescado brindará un beneficio similar.

Los beneficios de esta dieta van más allá de su efecto en las migrañas. Y es que una dieta BAJA en omega-3 y ALTA en omega-6 puede DISPARAR la inflamación, junto con el riesgo de enfermedades crónicas.

Entonces, el mejor enfoque para todo el mundo, ya se sufran o no migrañas, consiste en reducir considerablemente el consumo de omega-6, especialmente eliminando los alimentos procesados y evitando los aceites vegetales.

Al mismo tiempo, AUMENTE sus niveles de omega-3 agregando más pescado graso, como salmón, caballa y sardinas, a su dieta, junto con carnes alimentadas con pasto.

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