Eliminar el dolor articular SIN cirugía

Cuando sus huesos o articulaciones están en llamas, puede ser una tortura levantarse de una silla, alcanzar un estante alto, subir un tramo de escaleras o caminar unos pocos pasos.

Hasta que un día, simplemente no puede soportarlo más.

Así que visita al traumatólogo para ver si la CIRUGÍA puede librarle por fin del incesante dolor de rodilla, cadera, hombro o espalda.

Pero la investigación muestra que es posible que no necesite cirugía en absoluto, y que hay maneras más seguras de obtener alivio que pasar por el quirófano.

¿Alivio a cualquier precio?

Los procedimientos ortopédicos, como las prótesis de rodilla y cadera y la cirugía del túnel carpiano, son algunas de las cirugías más frecuentes.

Pero una operación quirúrgica no es sencilla ni fácil. Puede conllevar riesgos y, a menudo, SEMANAS o incluso MESES de dolorosa recuperación.

Entonces, ¿es la cirugía la MEJOR opción? Eso es lo que querían averiguar un grupo de investigadores de la Universidad de Bristol (Inglaterra), que analizaron a fondo los datos de 10 estudios referidos a otras tantas operaciones quirúrgicas ortopédicas habituales de rodilla, cadera, hombro, columna y muñeca.

Los resultados, publicados en BMJ (British Medical Journal), pusieron de manifiesto que algunos procedimientos quirúrgicos SÍ aliviaban el dolor… pero no funcionaban mucho mejor que las opciones no quirúrgicas.

Por ejemplo, vieron que en algunos casos el reemplazo total de rodilla puede ser una buena opción (yo he comprobado de primera mano que PUEDE ser una bendición para algunas personas). Pero lo llamativo es que aún así los investigadores descubrieron que esta intervención puede no ser significativamente mejor que la atención no quirúrgica.

Además, otro estudio reveló que muchas personas que se someten a la operación… NO DEBERÍAN HABERLO HECHO.

Solo el 44% de las prótesis totales de rodilla eran necesarias desde el punto de vista médico, y una tercera parte no debería haberse realizado nunca.

Menos invasiva, más eficaz

Bien, si no se somete a una intervención quirúrgica, ¿cuáles son sus opciones para combatir el dolor?

Bueno, depende del tipo de dolor que tenga, de la causa, de su situación personal y de su historial médico.

Pero para la mayoría de la gente, una de las mejores opciones iniciales es la pérdida de peso, que ayuda a aliviar la tensión de las articulaciones doloridas.

Otras opciones excelentes son el ejercicio y la fisioterapia, que ayudan a fortalecer los músculos que rodean las articulaciones doloridas y mejoran la amplitud de movimiento.

De hecho, el estudio respalda las tres opciones como primera opción, antes de la cirugía.

Pero por muy buenas que sean… puede que no sean suficientes.

Para obtener mejores resultados, yo recomiendo combinarlas con OTRAS opciones no farmacológicas y no quirúrgicas de eficacia probada. Por ejemplo:

• La acupuntura puede hacer maravillas para el dolor de rodilla, cadera, espalda y hombro.
• La quiropraxis es excelente para la espalda, el cuello y los hombros.
• Los masajes puede marcar la diferencia en el dolor de espalda.

Además, complementos como el MSM (metilsulfonilmetano), la boswellia y el colágeno UC-II pueden aliviar el dolor articular, ralentizar el daño y restaurar la movilidad y el confort.