Detenga HOY esta enfermedad que destroza la vida
Hay una enfermedad que arruina la vida y que afecta al 80% de las personas mayores.
Pero recibe escasa atención pública, los medios de comunicación rara vez la mencionan y los fondos para investigación son escasos.
Además, puede incapacitarle por MUCHO más tiempo que cualquiera de las enfermedades del envejecimiento más conocidas, como la diabetes y la demencia.
Es cada vez más común a medida que se envejece, y una vez que se llega a los 80 años, está prácticamente garantizado sufrirla.
Pero usted no tiene que limitarse a sentarse y esperar a que destruya su calidad de vida. Porque existen formas de ayudar a prevenir o retrasar su aparición y evitar que empeore.
Un problema que aísla del mundo
No es ninguna vergüenza tener una visión que no sea perfecta. MILLONES de personas mayores no le dan importancia a usar gafas; incluso se han convertido en un elegante accesorio.
Pero, lamentablemente, no pasa lo mismo con la pérdida auditiva (PA), que cuando está relacionada con la edad se llama presbiacusia.
En el mejor de los casos, se pasa por alto, y en el peor, se estigmatiza.
Para muchas personas, nada suena más a “viejo” que los audífonos.
La presbiacusia se hace notoria alrededor de los 60 años, y continúa su progresión lenta y silenciosa.
A los 65 años, el 43% de las personas mayores la tienen. A los 70 años, más del 66%. Y entre los 80 y 90 años, prácticamente TODAS las personas se ven afectadas.
Pero la edad no es el ÚNICO factor de riesgo.
También puede ser causada por el ruido (del trabajo o de todos esos conciertos musicales ruidosos) y por las toxinas, incluidas las que se encuentran en los medicamentos.
La presbiacusia reduce su capacidad para escuchar sonidos de alta frecuencia, que son componentes clave del habla y la conversación.
Como resultado, muchas personas mayores evitan actividades que les gustan, como socializar, ir al cine, hablar por teléfono e ir a restaurantes o espectáculos. De hecho, lamentablemente, la pérdida auditiva a menudo conduce a retraimiento, soledad, aislamiento, ansiedad y depresión. Y está directamente relacionada con el deterioro cognitivo y la demencia.
Algunos consejos
Afortunadamente, la ciencia está revelando nuevas actuaciones -sin fármacos- que pueden retrasar su aparición y progresión.
Como beneficio adicional, son bien conocidos por su capacidad para ayudar a COMBATIR el envejecimiento en general.
La primera es la restricción calórica. Los estudios en ratas revelaron que reducir la ingesta diaria de calorías en un 30% protegía las mitocondrias y el delicado oído interno contra el daño de los radicales libres, lo que mantenía la audición y retrasaba la aparición de la pérdida auditiva relacionada con la edad.
Simplemente reduzca las porciones de comida y diga “no” a los tentempiés. Asegúrese de llevar una dieta saludable y natural.
Otra herramienta potente es el resveratrol, que ayuda a desactivar los genes relacionados con el envejecimiento. El resveratrol también es un potente antioxidante y antiinflamatorio que, según estudios con ratones, ayuda a preservar y proteger la audición, especialmente si se comienza a tomar antes de que comience la pérdida auditiva.
Por último, pero no menos importante, si no le han hecho una prueba de audición, pregúntele a su médico si puede hacérsela lo antes posible. Si descubre que necesita audífonos, tráguese su orgullo y ÚSELOS.
No solo pueden permitirle volver a disfrutar de las conversaciones, la socialización y las actividades que le gustan… sino que también pueden reducir su riesgo de soledad, depresión, demencia, entre otros, y otros problemas de salud relacionados.