Convierta esa siesta en un placer (no en una necesidad)
¡Qué maravillosas son las perezosas tardes de verano! Qué bien se está en vacaciones, disfrutando de las actividades de ocio, no haciendo nada por obligación y echándose esas agradables y relajantes siestas.
Sin duda, es un placer disfrutar de una siesta ocasional cuando realmente no la NECESITA.
Pero es una historia completamente diferente si lo HACE con frecuencia y porque realmente la necesita.
Porque si a menudo tiene problemas para mantener los ojos abiertos durante el DÍA, probablemente signifique que NO está durmiendo la cantidad de sueño y con la calidad que necesita durante la NOCHE.
Así que hoy voy a compartir con usted una forma sencilla, avalada por la investigación, para ayudar a REVERTIR este ciclo nefasto de malas noches de sueño y necesidad de dormir por el día.
Así podrá echarse la siesta cuando QUIERA… no porque realmente lo NECESITE.
Falta de sueño
Quizá cuando era joven se prometió a sí mismo que nunca se convertiría en ese estereotipo popular cuando fuera mayor. Ya sabe, roncando en el sofá, frente al televisor, con esos despertares sobresaltados, todo aturdido y confundido…
A todo el mundo le pasa de vez en cuando. Pero a algunas personas mayores les ocurre todos los días.
Esa situación tras las comidas ocurre por algo que sucedió horas antes: haber dormido mal la noche previa.
Pues bien, si se siente identificado, le interesará conocer las conclusiones de un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Tsukuba (Japón) y de la Sociedad Japonesa de Promoción de las Ciencias. El estudio puso de manifiesto que una molécula de la que quizás NUNCA haya oído hablar, la NMN (mononucleótido de nicotinamida), puede MEJORAR la calidad de su sueño durante la noche y su energía durante el día.
La NMN es un componente básico de una molécula más conocida llamada NAD (nicotinamida adenina dinucleótido), que es vital para muchas funciones clave relacionadas con el metabolismo y la producción de energía.
El problema es que los niveles de NMN bajan naturalmente con el tiempo… junto con los niveles de NAD.
Por eso, los investigadores se propusieron ver si los suplementos de NMN benefician con tres problemas comunes en las personas mayores: la calidad del sueño, la somnolencia diurna y el rendimiento físico.
Los sujetos, de 65 años o más, fueron divididos aleatoriamente en cuatro grupos. Dos grupos tomaron 250 mg de NMN o bien por la mañana o bien por la noche, y dos grupos tomaron un placebo a esas mismas horas.
Y resulta que la toma de NMN sí marcó la diferencia, pero solo si se toma en el momento ADECUADO.
El grupo de NMN nocturno reportó MEJOR sueño por la noche y MENOS somnolencia diurna. Además, las pruebas físicas encontraron que tenían MEJOR función de las piernas, lo que significa MEJOR movilidad.
Revertir el proceso
Amigo, es una realidad que nuestros tejidos, músculos, órganos y huesos van desgastándose a medida que envejecemos.
E incluso si está relativamente sano, este deterioro gradual puede desencadenar problemas de sueño, fatiga debilitante, pérdida de movilidad y problemas físicos, como fragilidad y sarcopenia.
Sin mencionar que la fatiga puede causar depresión e incluso disfunción cognitiva. Lamentablemente, TODOS esos factores pueden robarle su calidad de vida y su independencia.
Pero NMN podría revertir este problema del envejecimiento. Se encuentra en alimentos como frutas, verduras, mariscos y carne, pero solo en pequeñas cantidades. También puede garantizarse un buen aporte en forma de suplemento, pero tomándolo por la noche.
Y como siempre le digo, comparta sus planes con su médico.