Disfrute los beneficios para la salud de las fiestas navideñas
Querido amigo,
Espero que esté disfrutando de unas maravillosas fiestas con familiares y amigos. Por eso hoy me gustaría echar un vistazo a algunas tradiciones de estas fechas que pueden mejorar tanto la mente como el cuerpo, ¡hábitos positivos que vale la pena llevar al nuevo año!
Cultivando la gratitud por el corazón y la mente
La Navidad es tiempo de familia, de recordarnos y sentirnos agradecidos por los vínculos personales con los que compartimos. Las investigaciones demuestran que la gratitud tiene beneficios tangibles para la salud, como reducir la presión arterial, reducir la depresión y mejorar la calidad de vida en general.
¡Y es una práctica que podemos cultivar a diario! Tomarse un momento para reflexionar sobre las personas y las experiencias que le brindan alegría, ya sea con la familia, los amigos o incluso un momento tranquilo consigo mismo, crea una mentalidad positiva que le ayuda a sentirse conectado y realizado.
La gratitud es, como dice la gerontóloga y experta en envejecimiento consciente Leah Buturain Schneider de la USC, “no es solo un sentimiento, sino un comportamiento”. Ella sugiere compartir por qué se siente agradecido y expresar aprecio a quienes le rodean.
Este simple acto no solo eleva elespíritu, sino que también crea vínculos más fuertes, ayudándonos a sentirnos menos aislados.
Fomentar las conexiones con los seres queridos
Las fiestas navideñas son un momento en el que nos esforzamos por conectarnos con los demás, incluso si es a través de una llamada. Mantener estas conexiones es esencial para la salud en general.
El aislamiento social se ha relacionado con riesgos para la salud comparables al tabaquismo o la obesidad, y el sentido de pertenencia que experimentamos en torno a la Navidad puede ser transformador.
A medida que envejecemos, nuestras relaciones se vuelven aún más importantes para nuestra salud y felicidad. Para muchas personas mayores, las reuniones sociales ofrecen el compañerismo que pueden extrañar durante otros momentos del año.
Por lo tanto, considere extender estas conexiones más allá de las fiestas, para mantener el sentido de comunidad y pertenencia que todos necesitamos.
Ayudar a los demás y cosechar las recompensas
Hacer voluntariado durante las fiestas navideñas es algo bastante habitual. Muchos eligen ayudar en refugios para personas sin hogar o en residencias de ancianos. Este acto de dar puede beneficiar tanto al que da como al que recibe.
Los estudios demuestran que ayudar a los demás aumenta nuestro propio bienestar mental, lo que nos genera sentimientos de satisfacción y propósito.
Puede ir más allá de las fiestas y realizar acciones de voluntariado más allá de la Navidad. Echar una mano a los más necesitados puede marcar la diferencia, lo que nutre un sentido de propósito y gratitud durante todo el año.
Mantenerse activo (¡y disfrutar haciéndolo!)
Muchas de las celebraciones navideñas tienen lugar alrededor de la mesa. Pero además de comer, muchas familias disfrutan de actividades como caminatas por el campo, partidos de deportes amistosos, etc. También son habituales los juegos de mesa y otros retos intelectuales, también beneficiosos para mantener ágil el cerebro.
Repartir las sobras
Los grandes festines navideños son una delicia… ¿pero qué me dice de las sobras? Como solemos cocinar de más, a veces sobra mucha comida.
Considere dividirla en porciones para disfrutarla en varias veces sucesivas y evitar así excederse para prevenir los picos de azúcar en la sangre. Trate de disfrutar de manera equilibrada en varios días los sabores navideños.
Seguro que está disfrutando de comidas deliciosas y buenos momentos con sus seres queridos. Pero recuerde que muchas de estas tradiciones pueden enriquecer su vida durante todo el año, manteniendo su mente, cuerpo y espíritu bien nutridos.
Así que, ¡brindemos por la salud, la felicidad y una temporada llena de gratitud!