Póngase en situación: es viernes por la noche y ha quedado con unos amigos. Decide pedir una copa de vino tinto, sintiéndose indulgente pero también diciéndose a sí mismo que el vino…
Si disfruta del placer de una copa de vino tinto de vez en cuando, la próxima vez que visite a su dentista puede decirle orgulloso que ha estado trabajando concienzudamente para prevenir…
¿Sabía que en realidad hay una razón biológica por la que le puede apetecer una copa de vino tinto al final de un largo día? ¡La excusa perfecta! Bueno, no tan rápido.…