(¡PELIGROSO!)

Amigo mío, estoy seguro de que visitar al dentista no es una de sus actividades favoritas.

¡Y no es el único!

Después de todo, que le pinchen los dientes y las encías con instrumentos afilados y taladros de alta potencia no es la idea de pasar un buen rato para nadie.

Pero una boca SALUDABLE está estrechamente relacionada con un cuerpo SALUDABLE… mientras que una mala salud bucal puede provocar inflamación y enfermedad de las encías.

De hecho, numerosos estudios han relacionado la enfermedad de las encías (enfermedad periodontal) con innumerables afecciones: enfermedades cardíacas, diabetes, cáncer y alzhéimer.

Es por eso que los chequeos dentales regulares son clave para una buena salud. Lo mismo ocurre con el mantenimiento de una buena rutina de higiene bucal en CASA.

Y esta comienza con el cepillado diario de los dientes, dos veces al día.

Pero, ¿alguien le ha dicho alguna vez CUÁNDO cepillarse? (Lo crea o no, ¡IMPORTA!)

Porque cepillarse los dientes en el momento equivocado en realidad podría hacer más MAL que BIEN.

El dilema dental

Como muchas personas, es posible que se esté cepillando los dientes DESPUÉS de desayunar.

Tiene sentido, ¿verdad? Cepillarse después de comer elimina las partículas de comida de los dientes tras la comida. Y además a priori no apetece lavárselos antes, pues el sabor de la pasta de dientes afectaría al sabor de la comida o al del zumo de naranja del desayuno.

Entonces, si bien es fácil defender lo lógico de cepillarse los dientes DESPUÉS del desayuno… ¡en realidad es una de las PEORES cosas que puede hacer por sus dientes!

La verdad es que el MEJOR momento para cepillarse los dientes es ANTES del desayuno. Esta es la razón:

Su boca alberga más de 700 especies de bacterias, muchas de las cuales causan enfermedades de las encías.

Las bacterias viven en la biopelícula de placa blanca y pegajosa que se forma en los dientes durante la noche. Estas bacterias producen ácidos que atacan el esmalte dental.

Si la placa no se elimina, se endurece y se convierte en sarro, lo que puede provocar inflamación y enfermedad de las encías.

Cepillarse a primera hora de la mañana ELIMINA el biofilm de la placa, junto con las bacterias peligrosas que pueden causar problemas.

El cepillado también cubre sus dientes blancos con una barrera protectora contra los ácidos presentes en los alimentos del desayuno, como la fruta, el zumo de naranja y el café.

Como beneficio adicional, se deshace del mal aliento matutino.

Por el contrario, si desayuna ANTES de cepillarse los dientes, está comiendo con toda esa placa llena de bacterias en los dientes y luego la distribuye por la boca.

Además, la placa SE DELEITA con la comida que recibe y produce aún MÁS bacterias y ácido.

Y lo que mucha gente no sabe es que comer hace que el esmalte dental se debilite temporalmente.

Eso es porque aumenta el riesgo de desmineralización del esmalte. También es el primer signo de caries.

Hinque el diente a ESTO

Nacemos con un solo juego de dientes. Y si quiere proteger los suyos, cepílleselos durante dos minutos ANTES del desayuno, tan pronto como se despierte.

Si REALMENTE siente la necesidad de cepillarse DESPUÉS, espere al menos de 30 a 45 minutos; ese es el tiempo que tarda su saliva en remineralizarse y restaurar el esmalte dental.

Aún mejor, cepílleselos ANTES y luego otra vez (30 a 45 minutos) DESPUÉS del desayuno.

Ese es un puñetazo doble que puede mantener sus dientes saludables los próximos años.

Por supuesto, no olvide cepillarse los dientes también antes de irse a dormir.