La “adicción de 30 minutos” que arruina la salud
La buena salud es el regalo más preciado de todos.
Y si tiene la suerte de tenerla, no haría nada a sabiendas para destruirla, ¿verdad?
Bueno, pues hay algo que en los últimos tiempos las personas, de todas las edades, simplemente AMAN. De hecho, es prácticamente una adicción que DESTRUYE la salud.
Y hay una buena probabilidad de que usted también lo haga.
Y un nuevo estudio ha revelado que esta historia de amor se parece más a una peligrosa obsesión…
Y podría DISPARAR su riesgo de enfermedad mortal en SOLO 30 minutos.
Charlas honestas
Amigo mío, hablo de los teléfonos móviles, una comodidad moderna de la que la mayoría de la gente rara vez prescinde, ni de día ni de noche.
Durante años, los proveedores de telefonía móvil han trabajado duro para convencernos de que los teléfonos inteligentes son tan inofensivos como una cesta llena de cachorritos.
Pero la investigación ha encontrado que sostener un teléfono en el mismo lado de su cabeza durante 10 años o más puede DUPLICAR su riesgo de desarrollar un tumor cerebral en ese lado.
Y ahora un nuevo estudio de la Southern Medical University de China encontró que un rato no muy largo de conversación a lo largo de la semana TAMBIÉN podría dañar su CORAZÓN.
Los investigadores rastrearon a los usuarios de teléfonos móviles durante 12 años. Al inicio del estudio, los sujetos NO tenían presión arterial alta, una de las principales causas de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
Pero las cosas eran bien distintas al final del estudio.
Resulta que los sujetos que realizaron o recibieron llamadas en un teléfono móvil durante 30 minutos por semana aumentaron su riesgo de hipertensión en un 12%, y lo hicieron en un 33% si tenían un alto riesgo de hipertensión desde el principio.
Incluso el uso de dispositivos de manos libres, como auriculares, no disminuyó el peligro.
Y cuanto más hablaban, mayor era su riesgo.
Aquellos que conversaban por teléfono durante seis horas a la semana (lo que es menos de una hora al día), aumentaron su riesgo en un 25%.
Pagar caro por la comodidad
En la década de 1970, menos de 600 millones de adultos en todo el mundo padecían hipertensión. Hoy en día, casi 1.300 millones de adultos la padecen.
Al mismo tiempo, el uso de teléfonos celulares se ha disparado.
¿Coincidencia? No, según los investigadores del estudio.
Mire, los teléfonos móviles emiten campos electromagnéticos que se han relacionado con tumores cerebrales Y con saltos en la presión arterial, incluso después de una exposición a corto plazo.
¿Qué significa eso para usted?
Bueno, comencemos con el hecho de que el estudio NO encontró un mayor riesgo de hipertensión en sujetos que hablaron por teléfono MENOS de 30 minutos por semana.
Entonces, si es posible, la próxima vez que necesite llamar a un amigo o familiar, llame desde un teléfono fijo (si aún tiene uno), o envíe un mensaje de texto (que emite muchos menos campos electromagnéticos). Simplemente intente limitar la cantidad de llamadas telefónicas que realiza desde su teléfono móvil.
Y además, apague su teléfono celular cuando NO lo esté usando.
Si no puede hacerlo, asegúrese de poner siempre la mayor distancia posible entre su cuerpo y su teléfono móvil (es una buena sugerencia para todo el mundo en cualquier caso).
Y en lugar de guardarlo en su bolsillo, le recomiendo invertir en una funda para teléfono con bloqueo de radiación electromagnética, (encontrará muchas opciones asequibles).
Finalmente, cuando llegue a casa, coloque su teléfono en una mesa o estante a varios metros de distancia, y nunca lo deje en la mesilla de noche de su habitación mientras duerme (y definitivamente NUNCA debajo de su almohada).