¿Madrugador o trasnochador?
Cómo la hora de irse a la cama predice el riesgo de diabetes y enfermedades cardíacas
¿Recuerda cuando éramos niños y quedarse despierto hasta tarde era lo mejor del MUNDO?
A veces nuestros padres nos dejaban quedarnos despiertos hasta tarde como un regalo especial. Otras veces nos escondíamos debajo de las sábanas con nuestras linternas y libros de historietas hasta que nuestros párpados no podían permanecer abiertos ni un momento más.
Aquello era divertido, ¿no?
Ahora que somos adultos, podemos fijar nuestra propia hora de acostarnos.
A algunas personas todavía les gusta quedarse despiertos hasta TARDE, mientras que a otras personas les gusta irse a la cama TEMPRANO.
Eso es porque los seres humanos estamos naturalmente programados para ser aves madrugadoras o aves noctámbulas.
Y ahora una nueva investigación ha encontrado que la forma en que USTED ESTÁ programado podría tener importantes implicaciones para su salud…
…y eso incluye INCREMENTAR su riesgo de diabetes tipo 2 y enfermedades del corazón.
Cogiendo el sueño
Como proclamó Benjamin Franklin, uno de los padres fundadores de Estados Unidos: “Acostarse temprano y levantarse temprano hace al hombre saludable, rico y sabio”.
No estoy seguro acerca de la parte rica y sabia, pero un nuevo estudio demuestra que MÁS TEMPRANO es mejor cuando se trata de una buena salud.
Los investigadores dividieron a los participantes del estudio en dos grupos, temprano y tardío, según sus cronotipos, es decir, sus ciclos naturales de sueño y vigilia.
Todos los sujetos se sometieron a una batería de pruebas para medir su masa y composición corporal, sensibilidad a la insulina y metabolismo de grasas y carbohidratos.
Luego, los investigadores analizaron a los sujetos antes y durante el ejercicio de intensidad moderada y alta para ver cómo quemaban combustible para obtener energía.
Después de analizar los datos, hubo diferencias muy grandes entre las personas que se fueron a dormir temprano… y las que apuraron la noche.
Para empezar, los investigadores descubrieron que los pájaros madrugadores eran más activos y estaban en mejor forma física que los noctámbulos.
Y eso solo fue la PUNTA del iceberg.
Las personas que se acostaban temprano eran más sensibles a la insulina, lo que les permitía quemar más glucosa, tanto en reposo como durante el ejercicio.
Pero la historia resultó MUY diferente para los noctámbulos.
Eran mucho más pasivos durante el día. Y cuando se trataba de su fuente de energía preferida, sus cuerpos usaban carbohidratos, no GRASA, haciendo que la grasa se acumulara en sus cuerpos.
Y para empeorar aún más las cosas, quedarse despierto hasta tarde los hizo resistentes a la insulina, una condición peligrosa que puede hacer que los niveles de azúcar en la sangre AUMENTEN.
Póngalo todo junto, y el resultado es que acostarse tarde podría aumentar sus probabilidades de desarrollar diabetes tipo 2, enfermedad cardiovascular… o AMBAS.
Según los investigadores, estos resultados probablemente apunten al ritmo circadiano, el “reloj interno” de su cuerpo. Gobierna sus ciclos de sueño/vigilia y controla la mayoría de los procesos del organismo, incluida la forma en que su cuerpo usa la insulina y quema combustible para obtener energía.
Reduzca SU riesgo
Amigo, si es usted un ave nocturna, NO tiene que esperar a que la enfermedad ataque. Aquí hay algunos pasos que pueden minimizar su riesgo…
- Comprométase a acostarse y despertarse solo 15 minutos antes durante una semana. Si eso funciona, aumente otros 15 minutos la semana siguiente. Continúe cambiando su horario gradualmente hasta que encuentre uno que pueda mantener cómodamente.
- Elimine los carbohidratos de alto índice glucémico, los procesados y los azúcares refinados de su dieta.
- Intente ser más activo y hacer ejercicio TEMPRANO durante el día. (La dieta adecuada y el ejercicio alentarán a su cuerpo a quemar grasa, no carbohidratos, para obtener energía).
- Considere el remedio a base de hierba berberina para ayudar a controlar el azúcar en la sangre. Los estudios han demostrado que puede funcionar con la misma eficacia que el medicamento para la diabetes metformina, pero sin sus efectos secundarios.